domingo, 24 de agosto de 2008

La Nada.

Se supone que, tras un mes de ausencia, tendría muchas cosas para decir.
Se supone.
En realidad tengo muchas cosas para decirle a muchas personas, pero ninguna es de interés general, por lo que no tiene sentido hacer referencia a ninguna de ellas.
Este vacío mental más que relajante es preocupante.
Las vacaciones están invernando en mi cerebro y ya es momento de que vaya llegando la primavera. Si es posible, la quiero en todos los aspectos de mi vida. Y que llegue en compañía de un sol que ilumine mis ideas y sentimientos y los de los demás, ¿por qué no?...
Eso me haría las cosas mucho más fáciles y tal vez lograría ser un poquito más feliz, solo un poquito.