lunes, 21 de julio de 2008

"Siempre" serás mi amigo...

Siempre le dí mucha importancia al día del amigo. De chica le escribía cartas a cada una de mis amigas diciéndoles cuanto las quería y todas las cosas que sabia sobre ellas.
El 20 de Julio de este año fue un día mas...
Me cuesta decirle a las personas cuanto las quiero y acordarme de ellas en ocasiones como esta, no soy una persona "atenta". Además soy muy exquisita con la palabra amigo. Por eso, y porque un misero peso quedaba en mi celular guardado solo para emergencias, elegí no escribirle a nadie. Sólo a mi único mejor amigo y a alguien que conocí hace un año y medio y que quiero muchísimo ( doble-nada.blogspot.com). Casos especiales...
El domingo a la noche me sentí rara, pensé que tal vez alguien pudo haberse ofendido por mi falta de consideración, pero este año sentí que no necesitaba desearle un feliz día a nadie, porque el cariño y la lealtad hacia los amigos se demuestra todo el tiempo, y recordárselos de manera que las empresas telefónicas ganen plata con mis sentimientos, me pareció patético...
Así que, acá estoy, explicando simple y poco literariamente como suelo escribir, que no tuve ganas de festejar...
¡Feliz día amigos!
;-)

miércoles, 9 de julio de 2008

Matices de un gris...

Nunca desarmes un bolso un día gris. Es como trepar a lo alto de un edificio de veinte pisos, pararse en el vértice de la terraza y extender los brazos como si fueras la protagonista de Titanic.
Nunca escuches esas canciones que pones cuando tenes ganas de llorar un día gris. Surten un efecto doble.
Nunca mires fotos del lugar en el que fuiste feliz un día gris. Es como hacerte consciente de que nunca serás feliz dos veces en un mismo sitio.
Nunca extrañes demasiado a alguien un día gris. Es como sentirte mucho más lejos de lo que estás.
Nunca odies a los que te hicieron daño un día gris. El dolor es más fuerte y ellos son más culpables.
Nunca desees algo con demasiadas fuerzas un día gris. El objetivo parece estar mucho más lejos.
Los días grises nacieron para decirle a alguien cuanto lo querés, para no dormir solos, para ahogarte en un abrazo y ahogarlo con un beso, para caminar mirando al cielo y reírse de a dos, para no estar solos...
Hoy es un día gris. Ya desarmé un bolso, escuché canciones deprimentes, miré fotos del lugar donde fui feliz, extrañé ( y sigo extrañando) demasiado a alguien, odié al que me hizo daño y desee con todas mis fuerzas que saliera el sol.
Pero el sol no salió...




jueves, 3 de julio de 2008

¿Quién soy?¿Dónde estoy?

Creo que todavía no me terminan de conocer...
La gente de acá digo...los de la gran ciudad. No sé, será que por estos días ya ni yo me conozco. A veces pienso que pienso demasiado.
Despegarme de mi pequeña ciudad, Coronel Suárez, me costó mucho y me sigue costando. Porque simplemente no me hallo en este lugar, no es MI lugar. Me encuentro diferente, no tan gris, aunque por momentos sienta que me contagio del ritmo tanto de los que caminan conmigo como de los que vienen en contramano, pero porque no me queda otra.
Mis amigos bahienses, o los que no son bahienses pero que conocí acá, están asustados. Ya no soy la del año pasado. Eso es lo que dicen y así es como me siento, o no...
La incertidumbre de lo desconocido, de encontrarme sola en una ciudad nueva, con caras nuevas, sin los ojos de mis viejos encima, me tenia fascinada. Pero como sucede siempre, la fascinación se termina de un día para el otro. Y esto ya no me atrae más...
Extraño mi gente, mi casa, mi club, mis calles, mis "paisanos", mi idioma, mis bares, mi colegio, mi vida de antes...¡la que YO era antes!.
No es que haya cambiado este año, es que estoy siendo como siempre soy cuando algo me tiene mal.
Esta ciudad me tiene mal...Hoy y ahora.
Mañana cuando me reencuentre con mis amigas de la infancia, estoy segura de que voy a volver a sentirme la misma Florencia de hace tres años atrás. Y cuando me acueste en mi cama de toda la vida, me voy a dormir con una sonrisa en la boca.
Porque todos tenemos nuestro lugar en el mundo, decime si no...